Miradores del Territorio Antiguo

Los miradores te ofrecen una visión diferente del paisaje. Te ayudan a entender mejor los procesos volcánicos de cada zona de la isla y son un alto en tu recorrido que te ayudan a coger fuerzas para continuar

Mirador del Emigrante (Garachico). Te permite imaginar la intensidad comercial del puerto de la localidad, el más importante de Tenerife hasta que la erupción del volcán de Trevejo del 5 de mayo de 1706 lo destruyó.

Mirador de la Ballena (Los Silos). Relájate contemplando la costa repleta de charquitos naturales junto a la enorme montaña de Taco.

Centro de Atención al Visitante Los Pedregales (Parque Rural de Teno). Desde este punto podrás admirar un valle que antes fue un barranco muy profundo, y que la erupción del volcán de El Palmar rellenó. Ahora es un suelo fértil sembrado de todo tipo de cultivos.

Mirador de Baracán (PR de Teno). Los barrancos más horadados de la Isla están aquí. Y también unas curiosas formaciones volcánicas en forma de línea creadas al atravesar la lava candente superficies de roca ya existente: los diques.

Mirador de Cruz de Hilda (PR de Teno). Se sitúa en el corazón del antiguo macizo rocoso de Teno, que fue creado por una sucesión de coladas basálticas hace siete millones de años. Te atrapará la contemplación del salvaje y abrupto  barranco de Masca.

Mirador de Cherfe (PR de Teno). Es un punto perfecto para apreciar volcanes de diferentes generaciones. A un lado, el macizo de Teno, de varios millones de años, y al otro la zona más activa de Tenerife, con volcanes surgidos en el último milenio. 

Mirador de Archipenque. Aquí comprendes nítidamente cómo nació esta parte de la isla. Sobre la base de laderas que se adentraban en el mar, distintas erupciones posteriores fueron acumulando lava hasta crear nuevas montañas ganadas al océano.

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