El paisajista Donald Steel creo en La Gomera, a sólo 40 minutos en ferry de Tenerife, un campo espectacular de 18 hoyos que se alza sobre un acantilado y mira al mar y al Teide, ofreciendo unas vistas impresionantes. La vegetación, autóctona en las zonas altas, va haciéndose más y más exuberante en su bajada hacia al mar, hasta llegar a una zona plagada de árboles tropicales y frutales.
El hoyo 4, uno de los más espectaculares, invita a jugar la bola sobre un barranco. Otro hoyo de especiales características es el 10, de 337 metros, cuyo tee se encuentra a 45 metros de altitud sobre el green.