Tenerife es un destino turístico ideal para los amantes de la naturaleza. Desde la costa con los imponentes acantilados de Los Gigantes hasta entornos tan idílicos como el bosque de laurisilva del Parque Rural de Anaga.
Si queremos seguir conservando estos paisajes naturales de ensueño, es importante realizar la visita con el mayor respeto posible al entorno donde nos encontramos.
Hoy te traemos tres consejos para que generes la menor huella posible a tu paso por la Isla.

Respetar la señalización de la red de senderos
La red de senderos de la Isla cuenta con 200 senderos homologados y más de 500 kilómetros en los que el visitante puede descubrir las maravillas naturales de Tenerife.
En cada uno de ellos existe señalización marcan cuál es el camino que se debe seguir: los colores indican el tipo de sendero, gran recorrido, largo recorrido o sendero local, y la posición de las rayas marca el sentido, en paralelo indican la continuidad y cuando se cruzan nos advierten de que estamos dirigiéndonos en la dirección equivocada.
Es importante no salirse de los senderos establecidos, porque aunque nos pique la curiosidad y el espíritu aventurero, bajo nuestros pies podríamos erosionar el terreno de estos espacios naturales y causar un daño irreparable.
Por otro lado, podemos prevenir los accidentes por adentrarnos en terrenos no preparados para el paso o desorientarse y no poder volver a encontrar la ruta original.
No alterar el paisaje
En los últimos años, apilar piedras en senderos y playas se ha convertido en una auténtica tendencia en las redes sociales. Aunque sea tentador alterar el entorno para conseguir una foto lo más instagrameable posible, esta práctica no es tan inofensiva como parece.
Una de sus consecuencias es que pone en riesgo a la flora y fauna local, debido a que altera las condiciones de humedad y temperatura claves para la microfauna y pequeños insectos.
La próxima vez que te encuentres en un paisaje digno de fotografíar, recuerda no mover nada de tu entorno.
Recoger los residuos que generas
¿Conoces el plogging? Esta práctica deportiva que se ha puesto de moda en los últimos años consiste en recoger basura de los senderos mientras se trota por ellos.
Para practicarlo solo tienes que elegir tu sendero favorito, elegir el calzado adecuado y armarte con una bolsa de basura y guantes para ir recogiendo aquellos residuos que vayas encontrando a tu paso. No solo es una manera de disfrutar de los parajes de la Isla, también ayuda al medioambiente.
Si correr no es para ti, también te recomendamos llevar una pequeña bolsa para ir guardando aquellos desperdicios que generes y ayudarnos a mantener nuestros bosques y playas limpios.