Pasear por las calles de San Cristóbal de La Laguna en Navidad es transportarnos a otro mundo. Al llegar a la Avenida Trinidad enseguida nos invade uno de los olores más característicos de estas fechas, las castañas asadas, tradicional refugio navideño para los que quieran escapar del frío bocado a bocado.

El ambiente invita a pasear por la calle Herradores, una de las principales arterías de la ciudad lagunera, que en otros tiempos fue capital de la isla. ¿No lo sabías? Hasta el siglo XIX esta ciudad fue la capital de Tenerife, acogiendo a importantes artistas y figuras de reconocido prestigio que acabarían dando a la ciudad ese encanto que aún conserva, siglos después, dándole el privilegio de ser un Patrimonio de la Humanidad.

Precisamente es en la calle Obispo Rey Redondo donde encontramos uno de los puntos con más encanto de estas navidades. La pasarela de luz que recorre el final de la calle y nos lleva hasta la Plaza del Adelantado se ha convertido en una de las atracciones favoritas tanto por los locales como por los turistas. No es raro ver a grupos de personas queriendo inmortalizar el momento, aunque si hablamos de inmortalizar momentos quien gana por mucho es la propia Plaza del Adelantado.
El éxito lagunero de estas navidades
Al acercarnos a la plaza lo pudimos ver enseguida: Pequeños grupos de personas haciendo colas para fotografiarse en unos bancos de piedra con unas alas de ángel con luces LED. ¡Hasta nosotros tuvimos que esperar un poco para poder inmortalizarlas! Pero es genial ver como la gente respetaba los turnos e incluso hacían cola para poder sacarse las fotos, uno de los lujos de estar en una ciudad rodeado por gente amable.

Después de visitar la Plaza del Adelantado, en la que por cierto también puedes saborear algunos dulces navideños, el siguiente “monumento” lagunero a la Navidad se encuentra en la Plaza del Cristo. Se trata de un árbol gigante de 20 metros de altura que ilumina todo el entorno de este amplio espacio, donde podrás también encontrar el Mercado de La Laguna. Esta plaza histórica delimitaba antiguamente la parte urbana de La Laguna y su parte agrícola, conocida como “Vega Lagunera”.
Y ya que hablamos de historia, en la Navidad de este rincón de Tenerife es conocido “Lo Divino”; parrandas de vecinos y vecinas que antaño recorrían las calles de la ciudad con instrumentos, entonando villancicos populares y locales para deleite de todos los transeúntes. Esta tradición se ha mantenido con los años y aún es posible ver grupos de personas recorriendo las apacibles calles de La Laguna, tambor en mano, entonando los villancicos más conocidos.

Navidad lagunera a tu ritmo
Porque si una cosa tiene la navidad lagunera es que precisamente es apacible. La puedes disfrutar a tu ritmo. Entre escaparate y escaparate puedes disfrutar de rincones navideños improvisados, edificios históricos o simplemente el traqueteo de la gente yendo de un sitio a otro, siempre a un ritmo tranquilo pues La Laguna invita a relajarse, desconectar y disfrutar del ambiente que te rodea.

Un pequeño reto para acabar: Tratad de sacaros una foto en cada rincón iluminado, verán como les queda un álbum de recuerdos colorido de la que se dice es la ciudad con la calle más bonita de España.