
Henry Moore, Joan Miró, Josep Guinvart, Pablo Serrano o Martín Chirino son algunos de los artistas de reconocimiento internacional que firman las esculturas que se encuentran en diversos puntos de la Santa Cruz de Tenerife. La isla conmemora, durante este año, el 50º aniversario de la I Exposición Internacional de Escultura en la Calle, que condujo hasta su capital a la gran mayoría de aquellas obras, a las que se sumaron otras en 1994, cuando se llevó a cabo la segunda edición de la exposición.
Observar hoy de cerca las 39 esculturas de ambas muestras que continúan expuestas en la capital, además de otra que está situada en el municipio de Garachico, es una experiencia extraordinariamente enriquecedora para quienes viajan hasta la isla. Todas, obras de vanguardia del arte moderno en su tiempo, se sitúan en grandes espacios públicos, como la Rambla de Santa Cruz o el parque García Sanabria. Se convirtió, así, la capital isleña en un gran museo al aire libre que cuenta, además, con un centro de interpretación.
Descubrir el origen de las obras y su viaje hasta Tenerife es un aliciente para acudir a él. Allí esperan, a los más curiosos, historias como la de José Abad, cuya escultura, situada en una de las principales arterias de entrada a la capital, fue realizada a partir de la chatarra de un avión siniestrado, que rodeó de una construcción geométrica de metal, a manera de caja abierta. O la de Henry Moore, cuya pieza expuesta originalmente tuvo que ser devuelta a París. Sin embargo, ante la demanda social, el autor permitió su regreso en otro formato, El guerrero de Goslar, convirtiéndose en la única pieza en España del máximo escultor inglés contemporáneo.
El Centro de Interpretación de Escultura en la Calle se encuentra ubicado junto al Reloj de Flores del parque García Sanabria, lugar en el que, por cierto, se pueden encontrar gran parte de las obras de las exposiciones. Un paseo por sus senderos, rodeado de una frondosa y cuidada vegetación, es también un paseo por una exposición abierta donde pueden disfrutarse trece de aquellas esculturas de artistas como Pablo Serrano, Óscar Domínguez, Eduardo Polozzi o Mark Macken.
Con motivo del 50º aniversario de la primera gran exposición que convirtió a Santa Cruz de Tenerife en un referente de la escultura internacional situada al aire libre, la capital acoge durante estos meses diversas actividades relacionadas con aquel gran acontecimiento. Entre ellas, y hasta el 28 de mayo, el centro TEA Tenerife Espacio de las Artes acoge una exposición que representa la evolución de la escultura hasta la actualidad.
El objetivo de la exposición es hacer entender y mostrar al público el tándem en el que tanto la escultura, como las artes vivas o en movimiento juegan un papel crucial como escenario de nuevas formas artísticas. Entre los artistas que toman parte se encuentran nombres nacionales e internacionales como David Bestué, Juan Bordes, Tony Cruz Pabón, Victoria Encinas. Victoria Encinas, Petrit Halilaj y Sarah Maldoror.