Miradores en Tierra de Contrastes
En tu recorrido por este territorio no debería faltar la visita a sus miradores.
Mirador del Pino Gordo (Parque Natural de la Corona Forestal). Aquí vive el famoso Pino Gordo. Con varios siglos de edad, presenció la aparición de los nuevos volcanes de la isla.
Mirador Sendero Las Lajas (Parque Natural de la Corona Forestal). Este mirador ofrece una preciosa panorámica sobre la punta sur de Tenerife, presidida por el macizo más antiguo de la isla, el Roque del Conde, y otros volcanes como Ifonche y Trevejos. Permite apreciar cómo el pinar canario ha colonizado el suelo volcánico.
Mirador de las Narices del Teide (PN del Teide). Pico viejo es uno de los cráteres más impresionantes de Las Cañadas. Surgió hace unos 200.000 años y su última erupción son las lavas negras conocidas como Chahorra o Las Narices del Teide. Imprescindible.
Mirador de Montaña Samara (PN del Teide). Desde lo alto del volcán de Samara podrás observar un volcán reciente que forma parte de la zona más activa de Tenerife, la Dorsal de Abeque. Cenizas, lavas, bombas volcánicas, cráteres… es una exposición al aire libre de la forma del interior de la tierra y de la construcción de la isla.
Mirador de Chirche-Guía de Isora. Tras los, a veces violentos, procesos eruptivos, pequeños animales y plantas colonizan el terreno. Son insectos, líquenes y musgos que van dando paso al asentamiento de especies mayores y después del hombre, que se instala en caseríos como el de Chirche.
Mirador de Los Poleos-Santiago del Teide. Las vistas te ofrecen una perspectiva de la dorsal nororeste de Tenerife. Aquí es donde se han producido la mayor parte de las últimas erupciones de la isla.
Mirador Valle Santiago-Santiago del Teide. La agrupación de volcanes que ves desde aquí es la conocida como Dorsal de Abeque, la zona volcánica más activa de la isla. Pero no te preocupes, con el fin de preservar la seguridad de la isla y sus habitantes, los científicos realizan mediciones todos los meses sobre su actividad sísmica y volcánica.
Mirador de Garachico. En un intervalo de 11 días, el volcán de Trevejo acabó en 1706 con el puerto de Garachico primero y con casi todo el pueblo después. Desde este mirador contemplas las coladas de lava como recuerdo del trágico pasado.
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