Mujeres para la revolución tecnológica

Conocí a Cristina Aranda en febrero pasado, cuando el Covid-19 dejó de ser un problema chino y nos anularon el World Mobile Congress. Entonces el ecosistema emprendedor de la ciudad condal se levantó en peso, y en solo dos semanas puso en marcha la alternativa al encuentro anual de tendencias con el Barcelona Tech Spirit.