Ya sabíamos de la importancia de los centros de congresos y los recintos feriales en la actividad cultural y de negocios de las ciudades. Esta crisis del coronavirus nos está mostrando un uso inesperado para estas instalaciones, pero imprescindible en la batalla contra el virus. Muchos de estos recintos están siendo reconvertidos en hospitales de campaña ante la previsible saturación de los hospitales. Sus grandes espacios diáfanos y el fácil acceso facilitan la instalación de todo el material necesario para el tratamiento de pacientes con síntomas leves, liberando espacio en los hospitales para tratar los casos más serios.

En Tenerife, las intalaciones del Centro Internacional de Ferias y Congresos (nuestro recinto ferial, donde Turismo de Tenerife tiene sus oficinas) se transformarán temporalmente en hospital, además de centro de distribución logística. De la misma forma, en Madrid las instalaciones de IFEMA también se han habilitado para ayudar en la lucha contra la pandemia, convirtiéndose en uno de los mayores hospitales del mundo con 5.500 camas.

En Londres, su mayor recinto ferial, ExCel, también se transformará en hospital durante esta crisis, incluso renombrándolo temporalmente como NHS Nightingale Hospital. En Estados Unidos, recintos como el Westchester Convention Center, el Baltimore Convention Center, el Atlantic City Convention Center, el Jacob Javits Center de Manhattan, y otros muchos recintos están siendo reacondicionados para esta emergencia global.

Hoteles alrededor del mundo están ofreciendo también sus habitaciones y salas de congresos para instalar infraestructuras hospitalarias o de coordinación, así como otras empresas de toda la industria de los eventos poner su personal y logística a disposición de las autoridades sanitarias. La industria MICE está mostrando su lado más solidario y su responsabilidad para con la sociedad, incluso siendo el sector turístico más afectado antes y durante esta crisis del coronavirus.

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