Diseña tu plan carnavalero

Si no has vivido antes el Carnaval de Tenerife, no es extraño que te hagas un lío con las fechas y los días en los que es mejor venir a la isla a vivir esta fiesta como se merece. A continuación te explicamos algunos detalles importantes que te ayudarán mucho a programarte.

Aunque el carnaval oficial arranca con los concursos de las distintas agrupaciones (murgas, comparsas, rondallas), el verdadero espectáculo comienza con la Gala de Elección de la Reina. Ese acto siempre cae en miércoles, y dos días después, el viernes de Carnaval, la alegría se desborda con la colorida y desenfadada Cabalgata Anunciadora. Para entonces ya deberías haber llegado a la isla.

A partir de esa misma noche las calles del centro de Santa Cruz se llenan de música y de disfraces. No es un estudio científico, pero puede que solo una de cada mil personas, o de diez mil, vaya sin disfrazar en esos bailes. Así que si lo que deseas es precisamente pasar desapercibido entre la muchedumbre, búscate un disfraz en cuanto puedas.

Animadoras con pelos en las piernas

Es de lo más normal cruzarte con grupos de hombres peludos vestidos de animadoras o con alguien que luce un espectacular traje inspirado en una película de fantasía; en realidad, hay tantos disfraces como personas salen a disfrutar, que esos días se cuentan por cientos de miles. Y no es ninguna exageración. De hecho, Santa Cruz posee el récord Guinness de gente bailando a la vez al aire libre. Ocurrió en 1987, cuando la estrella de la música salsa, la cubana Celia Cruz, puso a mover el esqueleto a más de 250.000 personas en la céntrica plaza de España y alrededores (la marca continúa imbatida).

Durante casi dos semanas de carnaval, en Santa Cruz se desata una mezcla encantadora de locura divertida y buen rollo —otra de las cosas que hacen inconfundible a esta fiesta—. Eso, a pesar del inmenso gentío que se reúne en los bailes de la noche y en el carnaval de día, por cierto, ideal para pasarlo junto a toda la familia.

El Coso, La Sardina y La Piñata

El martes de Carnaval, el Gran Coso de la avenida de Anaga representa el punto álgido de la fiesta. Un desfile apoteósico que cuenta con cientos de miles de asistentes entre integrantes de la propia cabalgata y público.

La noche del Miércoles de Ceniza es otra cita a apuntar. El Entierro de la Sardina es con diferencia el más divertido de los funerales a los que asistirás en tu vida. Para rematar, el “triste” acto se cierra con un baile multitudinario en las calles santacruceras hasta altas horas de la madrugada.

¿Y después? El siguiente fin de semana (llamado de Piñata), los bailes vuelven a transformar la ciudad con el Carnaval de Día y los bailes nocturnos. Pero todo lo que comienza, termina, y el domingo la fiesta se despide hasta el año siguiente… ¡solo en la capital! Muchas otras localidades y pueblos de la isla no han hecho más que comenzar su propio y peculiar carnaval, igual de animado y sorprendente.

Participa como uno más; mimetízate

Mimetizarte en el ambiente carnavalero no encierra ninguna complicación. Es tan sencillo como hacerte con un disfraz que se adapte a tus gustos. Lo puedes encontrar a precios asequibles en las tiendas especializadas, que esos días ofrecen cualquier elemento que necesites para convertirte en superhéroe, en gladiador o en enfermera sexy, incluyendo pelucas, adornos y toda clase de maquillaje extravagante.

Solo tienes que añadir un ingrediente más: las ganas de pasarlo bien. De hacer una gran broma exagerando el personaje que representas con tu disfraz. La clave está en reírte y hacer reír con tu boa de plumas, con tus pestañas postizas de extensión kilométrica o con tu cara iluminada por la purpurina, ¡eso es todo!